BCCPAM000535-7-25000000000000

Año 1799 »- 519 mediados de Agosto que lo he intentado, y aún aho- ra, es tan aceleradamente que no sé si me dará lugar á decirlo todo. Sea lo primero que el 16 de este de- bo salir para Puerto Real, sino dispone Dios otra cosa, á predicar la novena del Rosario de Ntra. Se- ñora, para lo que me aguarda allí su Jlmo. Allí hablaré con mi R. P. Provincial sobre nues- tros asuntos y seguiré después á otra parte, si acuso determinase que vaya á alguna. Para prepararme algo empecé unos medios ejer- cicios y me ha sido imposible el continuarlos por los estorbos que han ocurrido, lo que me ha sido de bastante desazón. No lo merezco. Hace tiempo que pensaba remitir á V. ese papel que me confió el director de esa buena alma en Ecija el Rdo. P. Presentado González, después que vine de Málaga, cuyo eontenido es muy conforme á lo que allí vimos y sucedió. Por lo que respecto á mií, no dudo que da el Señor á entender el que quiere que sea y cual debe ser mi interior y mi predicación para no desagradarle. Pe- ro cada día me hallo más distante de ser el que de- bo, Su Majestad tenga misericordia de mí y se mu- de este helado y empedernido corazón. En los primeros días del pasado Agosto estando en la oración Ó en no sé qué otro ejercicio, se me propuso con viveza Míhi vivere Christus est. Paré li atención en distintas ocasiones á ver si percibía su significado, porque desde luego las tomé por punto de meditación y no ocurriéndome cosa alguna me persuadí que se me daba aquel aviso, para que con él obrase cuanto me correspondía, y ante todas cosas, el buscar es significación en algún expositor sa- grado. Hícelo así y en el primero, que fué el P, Alá- pide hallé que Ntro. Sr. Jesucristo es causa de nues-

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz