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— 609 — NOTAS No está mal la ocurrencia de querer p:oponer para Obispo á nuestro P. González á los 71 años de edad. Mereció serlo, pero no á4esa hora, y lo mereció tanto, como le espantaba esa alta dignidad lo que dice sobre los casados, prueba cuan lleno es- taba su corazón de celo por el bien de los prójimos, y cuanto deseaba la santificación de todos los estados. En lo que dice de la M. Zayas se muestra doctísimo y muy experimentado en las vías del espiritu Los consejos que le da al Beato sobre la predicación en la córte y lo que por él se interesa, acreditan á este santo varón, no sólo de Padre especialísimo del Beato Diego, sino de espíritu esforzado, como el de los már- tires Las personas nombradas antes de terminar, son todas conocidas de los lectores, y el gracejo con que acaba es puramente de un santo andalúz. El Beato Diego no contestó á esta carta, porque pen- saba venir á Sevilla, cosa que no pudo realiza 4 última hora; por lo cual le escribió la siguiente el P. González, dándole las instrucciones que juzgó oportunas. a e, ES os SS hd mu