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— 29 falta, que teniéndolos, tendremos apóstoles de la verdad, mártires de la fé, y santos de todas clases. A DONES ESPECIALES DEL P. GONZALE:? A las cualidades generales del buen director, reunía el P. Javier otros dones de Dios y otras cualidades especiales muy estimables. Tenía cora- zón ardiente, dulzura encantadora mezclada de fortaleza, y tesón apostólico; con este último con- seguía siempre su fin, y con aquella primera lo conseguía, complacie ndo á los demás. Era amable por naturaleza y por yvirtud, persuadido de que sin amabilidad y ternura no se dirige bien á nadie. Es tan necesaria esta amabilidad y esa ternura en el buen director que sin ellas quizás no darían todas las otras cualidades buenas el resultado apeteci- do: ¿Cómo ha de dirigir bien á las almas, quien no las ame entrañablemente? Y cómo las amará, quien tenga un corazón frío, seco y falto de ternura? Y sin esta ternura y afecto sí into ¿ ¿cómo las consolará y animará? ¿Y en muchos c asos á qué se reduce la dirección de un alma, sino á consolarla y animar- la, para que no desmaye ni desista de la empresa comenzada, ni vuelva atrás en el camino por don- de Dios quiere llevarla? Por eso el buen director debe tener un corazón lleno de caridad y dulzura, de fortaleza y amor santo, cual lo tenía este varón justo, según indican las' frases /ijo de mi alma, y Fr. Diego mío, que prodigaba á su dirigido.
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