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XII. El nombre del religioso y la virtud de la religión Religiósitas custódict et justi- Ácabit cor. La religiosidad guarda y justifica el corazón. EcLr. 1. 18, EE 1 estimada Margarita: Quedamos conformes el otro día en dedicar la presente á estudiar el sentido de la palabra religioso con todos sus adherentes, dando á conocer la rica mina que hay encerrada en ella; y esta me parece la ocasión más oportuna para ponerlo por obra. Esa palabra la pro- nuncian muchos y la entienden pocos, porque pocas son las personas que conocen su significado teológico y pa ascético; y por esoes muy de actualidad sacar á relucir lo que está escondido en el seno de ese Meseblo, al parecer tan sencillo. ¡Religioso! Este es el nombre quese da por anto- nomasia á la persona que vive totalmente consagra- da al servicio de Dios: religioso es el nom bre del que, siendo á un mismo tiempo inmolador y víctima, se ofrece á sí propio en sacrificio y se inmola en holo- causto perfecto, sobre el ara santa en el fuego del amor divino: religioso es el nombre de aquel que por razón de su estado debe ser la virtud de la religión personificada y puesta siempre en ejercicio; el nqm- 6

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