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LS mu ¿tati 52 PP e .. .. e La imprecación se llama execración, cuan- do recae sobre el mismo que la profiere. EjEmMPLOS: E Í Si oblitus fuero tui, Jerusalem, ob'ivione detur dex- ' | tera mea. Adhwereat lingua mea faucibus meis. si non E h | meminero tui. 4 E | Salmo 136. ñ h ! | i Lar . IN Y que el cielo todo junto Ñ dd Sobre mí caiga y me abrase; lo p Y que viva en pena eterna 0. E Sin consuelo de mi padre; 52) EA Y que el moro por quien muero uN E No me quiera ni me ame, An de Ni á las fiestas donde fuere y Mi cifra le acompañare, ss ; Si antes que pase tres días O ES No le cuento yo á mi alfaque > EN SS Las injurias que me has hecho. A Romancero, A ' 3. o 7 E El P. Granada pone en boca de un con- e q denado estas horribles maldiciones, que tienen i . .. .. o tanto de imprecación como de execración: IE Oh ciego de mil Oh miserable de mí! Oh mil veces ho] , malaventurado de mí, que así me engañé!l Maldito sea mi ¡ quien me engañó, y maldito quien no me castigó, y mal- A _ dito el padre que me regaló, y maldita la leche que mamé E AS y el pan que comí, y la vida que viví. Maldito sea mi par- 8 to, y mi nacimiento, y todo cuanto ayudó y sirvió para 3 que yo tuviera sér. A nl Ñ F