BCCPAM000535-2-20000000000000

— 103 — Y abrasado Con ese fuego sagrado, Te cantaré noche y día, Reina mía! VA Las combinaciones anteriores suelen lla- marse de pié quebrado. Yacé en silencio la noche oscura; Débil campana doblando á veces Convida á orar. Duérmese el mundo, y en la clausura Coros de Vírgenes alzan sus preces Ante tu altar. Sanchez de Castro. ¡Piedad! el solo grito que sale de mis labios; ¡Piedad! el solo ruego que inspira la verdad; ¡Piedad, piadosa Virgen, olvida mis agravios! ¡Piedad de mí, piedad! Idem. Madre mía, mi norte, mi faro, Pues eres amparo Del triste mortal, No desoigas mi voz suplicante Y dame constante Favor celestial. Y al llegar de mi estrema agonía El tétrico día De anhelo y temor, Mi postrero sollozo y congoja, Tu seno recoja En paz y en amor El mismo.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz