BCCPAM000533-7-28p1d000000000
La presente publicación consta de dos partes, bien diferenciadas, incluso con el tipo de letra. La primera: Superiores provinciales y tablas conventuales durante la exclaustraciór (1835-1877) y el Comisariato Apostólico (1838-7885), es un intento por mi parte d ordenar cronológicamente la jerarqula de la Provincia y tratar de reconstruir lo que podrfa haber sido unas Tablas Capitulares de la distribución de los religiosos que intentaron, primeramente, volver a juntarse en los conventos y, posteriormente, a partir de 1877, comenzaron a volver a los conventos recién restaurados. Con esto quiero decir que se trata resultados provisionales, sometidos a todo tipo de correcciones conforme la documentación sea más abundante. La segunda parte es la transcripción de los documentos contenidos en nuestro Archivo Provincial de Valencia (APCV 01: Exclaustración (1835-1877) y Comisariato Apostólico (1838-1885) (1 ). No todos los documentos son inéditos, pues algunos han sido ya publicados; ni todos son originales, pues algunos, como se indica en su lugar respectiw, son fotocopias cuyo original se encuentra en el Archivo General de la Orden en Roma. Sin embargo, creo que es positiw wlver a publicar dichos documentos y tenerios todos juntos. Es una documentación muy desigual en cuanto al estilo y al contenido ya que no es obra de una sola persona. Junto a la seriedad y frialdad de un informe sobre el número de religiosos existentes en la Provincia, está la notificación y el desarrollo del que podríamos calificar de "espectáculo histérico" dado por el P. Andrés de Finestrat en las estaciones de ta RENFE de Albuixech y Pu~ol. Es digno de resenar toda la documentación, esparcida por diversos apartados, acerca de los intentos de apertura de la Magdalena por parte del P. Tomás de Benifayó y otros religiosos exclaustrados como colegio de misiones y casa de ejercicios, y ta oposición encontrada en el Comisario Provincial P. Antonio de Foyos al proyecto. A decir verdad, en descargo del Provincial, a los ilusionados frailes restauradores de la Magdalena les traicionaba el inconsciente: los deseos eran más amplios que la realidad. Por eso, cuando consiguieron al fin juntarse, el intento duró para la mayorfa un día solamente. A la manana siguiente de la apertura de la Magdalena en 1853, únicamente quedaron en ella tres religiosos, de más de ochenta anos y enfermos; los demás se volvieron a sus puntos de residencia y a sus trabajos ministeriales. Los fervores de la misa y la mesa de reapertura del día anterior se habían esfumado. ¡Qué lástima que en aquel tiempo no hubiera todavía video! También tiene un lugar destacado dentro de la presente docury,entación el asunto que se etiquetó en este tiempo como de los Disco/os. Se trata de los enfrentamiento entre el Comisario Apostólico, P. Joaqufn de Llevaneras, y unos cuantos religiosos, que al final ( 1) He dejado dos documentos sin transcribir, de la carpeta titulada Circulares de los Ministros Generales (APCV 0101 ), ya que los he considerado demasiado generales en cuanto a su contenido. El primero es una carta del P. Egidio de Cortona, Ministro General, anunciando que por decisión de la Santa Sede se alarga su mandato (20 abril 1881 ); el segundo son las Ordenaciones de 65º Capítulo General ( 1884) en la traducción francesa realizada por el P. Apolinar de Valencia, de la Provincia de Paris.
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz