BCCPAM000533-4-12000000000000

.\\ \\ u 11 CALATRAVA 1 I 3 Madrid, a veinte días del mes de agosto de mil setecientos veinti– siete .--Yo el Rey. Los vecinos de La Calzada qu,e asistieron al Ayuntamiento para la aprobación ele la fundación del Convento fueron don Ambrosio Gijón, Cura ; don Blas García del Pulgar, Teniente; don Juan Ruiz. ele Fernán Gón~ez, Presbítero; don Juan García J eri, Presbítero; don Gaspar de Cisneros Goy, Diego López de la Serna, Antonio López de la Serna, Juan Fermín Calvillo, Eugenio ele Marcos, Juan 'I'eódoro Jaico, Francisco Ruiz ele las Mesas, Mekhor Camacho, Se– bastián de Herrera, Sebastián Regio, León ele la Calle, Alfonso Ruiz Ganavacas, Miguel Martínez Acebo, don Diego Cisneros Coy, don Antonio Céspedes, don Juan Antonio Céspedes, Francisco Sánchez Gui as, don Nicolás de Acevedo y Figueroa, don Nicolás I gnacio Díaz, Francisco Ruiz Ganavacas, don José Llopis Tejada, José To– más Limón, ·Esteban José Tamazón, Juan García Ureña, Juan Pé– rez, José de Escobar, Tomás Almodóvar, Luis García, Juan Se– rrano, Juan Alm,odóvar Bauti ta, Juan Teodoro Peñuelas, Alfonso Limón Vizcaíno y Cristóbal Racionero (r) . Proniulgada ya la pragmática regia sobre la fundación en Calza– da, el 22 de niaJ'º de 1729 se j,vuso la priniera piedra de nuestro Con– vento de Da Calzada, y <;ledicóse a San Luis, Obispo de Tolosa y frail e de nuestra Orden. Fué fundación de grande solemnidad, que ejecutó con las ceremonias acostumbrndas el Sr . D. Juan Quijano, Prior del Sacro Con-vento de Calatrava, convidado por N. P. Provin– cial para este devoto acto. Habi endo nuestros Religiosos tomado posesión de la nueva' Residencia, los calzade1ios m.ostraron con ob ras el gran afecto y veneración que profesaban a los Capu.chinos, que ya tantas veces habían manifestado con buenas promesas y efica.ces de– seos. Así, era tanta la concurrenc·ia de g entes que f:r. ecuenta.ba la iglesia de niiestro Convento, que bien pronto se pensó en la n.e.c.esi– dad de agrandarla, para dar ca,bid,a a tantos devotos como allí a.0&– dían a beber de las puras cristal;inas aguas de vida eterna qHe bro– tan del Tabernáculo. De lo nos da noticia el adjunto do cumento, así como también des cubre ante nuestros ojos lo que ya anteriorni ente hemos dicho 0 sea que en la edifi cac-ión de l.a nueva residencic¡, no hiibo p~rson; perita que dirigi ese las obras, originándose de esto una construcción insegura, gast:os excesivo s y cont·iniias reparacion es n ecesarias sí pero d,e ni11.gún 111 érilo ai-lístico. ' ' (r) Arch. Cap. Prov. Cast. , 30/000175.-Es una copia del anteriol", co- piado co n el número 30 /000174. y, por lo mismo , se suprime su copia. 8