BCCPAM000533-1-33000000000000

= E mia, ámale así: amaá tus prógimos por Dios, y cuenta con tu temporal y eter- na felicidad. MEDITACION SEGUNDA. Que debemos amar á Dios por ser sumamente bueno. Considera, alma mia, que la razon té dieta que la voluntad humana no ama sino el bien verdadero, ó6-lo que bajo algun respecto ó apariencia se le repre- senta como bueno. Cuando ama lo malo, no lo quiere en cuanto*malo, sino' por- que viene el mal encubierto con eb ves-' tido del bien; y pervertida la voluntid' con este disfraz engañoso, se aparta de la rectitud, mo amando lo malo, sino siguiéndolo como un aparente bien que

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz