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48 dencia” de. reservarle las deshoras -para' que descansase: mas ¿como había de descansar? ¿Quien ha visto al fue teniendo pávulo contenerse? El incendio del amor de Dios y del prógimo tiene todavia propiedades mas enérgicas y fogosas que la llama material. El no deja descansar al pe. cho que posee : asi fue en el V. P. Salvador. Su caridad no le sufre tomar descanso. Se presenta al Sr. Gura de la Magdalena, y le da noticia del destino qus tenia en el Sagrario, y que estaba desocupado en las deshoras, para que si gustaba lo ocupase en aquel tiempo. El Párrocono se dejó rogar: lo recibió como un Angel bajado del Cie- lo, porque ya le iban faltando las fuerzas, y aceptó el efrecimiento que le hizo el V. P. Salvador. ¿Y qué resul- tó de aquí? Lo que no es creible pueda sufrir cuerpe compúesto de carne y sangre, y sujeto al cansancio. * FiN DEL €UADERNÓ CUARTO.