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== 7. Sor Antonia de S. Juan Bautista habia mu- chos meses, que padecia unas cuartanas, no solo molestas, sino tan malignas, que no la permitian un rato de descanso, ni aun levantarse de la cama por breve tiempo. Un dia que se hallaba mas afligi- da le pidió al santo le concediese el alivio solamen- te de poder visitar su sepúlcro, contentándose solo con esto; pero la liberalidad de los santos, que no son escasos con sus devotos, le concedió el beato Lorenzo, no solo lo que pedia, sino mucho mas, pues apenas hizo su oferta, cuando se sintió me- jorada: bajó á visitar el sepulcro del santo y pidién- dole la salud, se halló de repente sana y buena. 8. Continúa aquí la informacion ya citada y va refiriendo varios casos y prodigios obrados con di- versos sugetos; pero dejándolos para adelante, pon- dremos solo algunos otros prodigios, que ha obra- do el Señor por su siervo con las mismas religiosas de la Anunciada, para no descontinuar la historia y constan en los otros procesos. 9. Sor María Josefa de la Concepcion, siendo refitolera, subiendo una banasta de vidriado de Talavera á una alacena muy alta, cayó de espaldas con ella y llamando en su ayuda al siervo de Dios, dijo: Valedme, Padre santo y vió'luego su patroci- nio, porque pensando se habia roto la cabeza, 6 algun brazo, ó pierna y hecho pedazos el vidriado todo, se halló sin lesion alguna, ni haberse que- brado un plato, ni escudilla, con admiracion de todas. | -10. Sor María Francisca del Sacramento tenia un flujo de sangre, sin hallar remedio en la medi-

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