BCCPAM000527-5-29000000000000

Le: E. sk q ú TM * UN | 3 o de su mano, con mil alabanzas de su virtud y doec- trina. (1). Ét + 00 10. El pudor y vergúenza, que causó en el hu- milde niño estas paternales demostraciones, ya se deja entender; pero como le gobernaba el cielo - para bien de muchas almas, á pesar de su humil- dad, le fué preciso usar de sus facultades, sin que del honor hiciese infame escala para la altivezy soberbia. Iba acompañado con dos padres á predi- car á la Catedral ciertos dias determinados, y se hacia con las campanas la misma señal que si predicara el Arzobispo, y aun muchas veces asis- ia esteá sus sermones, admirado de ver una cosa tan rara. Causaba tal emocion en la ciudad, que eran crecidísimos los concursos de todas clases de gentes; hasta los Canónigos y Religiosos asis- tian á sus sermones, no por curiosidad, sinó.por DP -el mucho provecho que sentian en sus almas; pues tenia el inocente orador tal eficacia en el - decir, y eran tan inflamadas sus palabras, que compungia á todos, haciéndoles derramar lágri- . 8 de : > a Aprendia en los cuadernos de Jesucristo l s s nes que predicaba, y á la fogosa luz de este divino cartapacio salia tan inflamada su voluntad en amorosos incendios, comoilustrado su entendi- miento en celestiales noticias. Parecian sus voces truenos del cielo, y saetas de fuego que herian los corazones con la contricion,y los derretian en lá- grimas de verdadero arrepentimiento de sus cul- (1) Suma de los procesos, pág. 31 y 15. A e