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Vida de San Fidel CAPITULO XVIII La Sagrada Congregacién de la Propaganda Ev afio 1599 un religioso capuchino de Saboya, el P. Querubin de Mauriena, colaborador de San Francisco de Sales en la conversién del Chablais, propuso a Clemen- te Vill estableciese en Roma una Congrega- cién que tomase a su cargo la direccién de to- das las misiones del mundo. Merecié el pro- yecto la aprobacién del Papa, pero no llegé a efecto sino veinte y tres afios mas tarde. Fué pues el P. Querubin el primer promotor de la S.C. de Propaganda: Dejemos la palabra al his- toriador protestante Ranke: «Florecia por aquel tiempo en Roma un gran predicador, el P. Je- rénimo de Narni, que por la santidad de vida merecié la veneracién general y la reputacién de santo: llevaba al pulpito una grandeza de