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v Se aparecié la Virgen Santisima en Lourdes para ser la salud de los enfermos, el consuelo de los afligidos, el auxilio de los cristianos, para remediar toda necesidad, para enjugar toda lagrima, para calmar toda dolencia. Mas si para gozar de las gracias y bienes espirituales y tem- porales, que la Virgen nos _ ha traido con sus Apariciones, fuese necesaria visitarla en su Santuario de Lourdres, y beber el agua 6 lavarse con ella en la misma fuente milagrosa, entonces serian muy pocos relativamente los que podrian aspirar al goce de tales be- neficios; entonces estaria excluida de la participacién de esos bienes la porcién predilecta de los seguidores de Cristo, los pobres. Los pobres no podriamos emprender viajes largos y costosos para buscar remedio para nuestros males; los pobres tendriamoas que resignarnos A llorar lagrimas inutiles é infructuosas, pues no se habria aparecido para nosotros la Virgen en Lourdes Pero no, no es asi, ni, podia ser asi. La Virgen Santisima aparecida de un modo maravilloso en Lourdes, va apareciendo por medio desu devocidn en todos los paises del orbe, é invocada con amor y confianza, y tomada. con fé el agua milagrosa extraida de aquella fuente bendita, produce en todas partes los mismos prodigios que en Lourdes. En Flipinas ha querido Ella valerse especialmente de los PP. Capuchinos para extender y propagar en el Archipiélago esta devocion tan simpatica y arrebatadora, Y con no llevar aun tres lustros de cultivo desde su formal implantacion, se ha extendido con tal rapidez en este suelo, que apenas habra pueblo en isla alguna del Archipiélago, donde no sea conocida y amada Ntra. Sefiora de Lourdes. Gracias, Sefiora, por habernos escogido aunque viles é. indignos para ser los prego neros y portaestandartes.de esta’ devocion en las Islas Filipinas. Esforzarémonos en cotresponder-4 la..confianza que habeis puesto en vuestros siervos . * jCuantos os deben ya, Sefiora, la salud cuerpo! Cudntos mds os deben la vida de la gracia y os habraén de deber la vida eterna! Cumpliéndose en este afio de 1908 ¢/ Ouincuagésimo Aniversario de las Apariciones de Nuestra Sefiora de Lourdes, con razén se conmueve el orbe catdlico con sentimiento de gratitud y jubilo, y quiere celebrar la memoria de aquel fausto acontecimiento con las mayores demostraciones de alegria y entusiasmo, con fiestas religiosas y populares regocijos. Con tan plausible motivo se escriben libros, se abren certamenes y se emprenden romerias y peregrinacio- nes piadosas y todos los devotos de la Virgen Santisima se gozan oath ad

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