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tts, -has Franciscanas Misioneras d¢ Maria. la atencién de todo el mundo este serdfico Instituto, Los Sumos Pontifices lo han aprobado y recomendado, y cuenta en su seno mas de 4,000 Religiosas. En Espafia las seforitas mds distinguidas corren 4 los Colegos que tienen en Pamplona (Noviciado) y en Burgos; siendo asombroso también el incremento que va to- mando el Institnto de las Franciscanas Misioneras de Maria en otras nacioncs, Ante todo, este serdfico Instituto une admirablemente la vida contemplativa con la activa. Sus practicas ordinarias son: una hora de meditacién por la mafana y otra por la tarde, velar 4 Jestis Sa- cramentado, el silencio, el recogimiento, la presencia de Dios, las comuniones espirituales, actos de humildad y de mortificacién interna y externa, etc. La vida interior lleva las primeras atenciones; y por esto, cuando las Religiosas no sirven por su edad wi otras causas para los trabajos de la vida activa, se retiran 4 la vida contem- plativa, y sdélo atienden 4 la uniédn con Dios. Sus labores de vida activa abrazan todas las Bellas Artes y todas las necesidades espi- tuales y corporales de la humanidad. Las Misioneras se dedican a la pintura, escultura, arquitectura, tapiceria, bordado, literatura etc. Dirigen y redactan varias revistas de buen gusto y mérito, Tienen talleres de toda clase de labores y dan gratuita instruccién de todo género; pero no admiten colegialas de pago, para asi evitar toda sombra de interés. Como verdaderas Franciscanas, les gusta vivir de caridad y limosna, y expenden las labores de sus manos para atender a las necesidades de las Misiones que sostienen entre infie- les. Sus obras de caridad corporal abrazan los hospitales, asilos, orfanotrofios, etc. Recogen a los nifios y nifias que andan errantes por las calles, los alimentan y los instruyen gratuitamente entre dia, y por la noche los entregan 4 sus padres. Los jévenes y las mozas que se ven obligados 4 asistir 4 alguna fabrica 6 centro peligroso para ganar un pedazo de pan, en los talleres de las Franciscanas Misioneras de Maria hallan jornal, pan, moralidad é instruccidn, Pero donde desarrollan en toda su plenitud el fin de su Insti- tuto es en las Misiones de infieles. Vuelvan, como palomas blancas, A PENAS lleva veinteséis afios de existencia y esta llamando [i

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