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OPERACIÓN URGENTE MÁLAGA. - «Encontrándome grave– mente enferma de un embarazo «ectópico con rotura tubárica>> y teniéndome que operar urgentemente, me encomendé a Fray Leopoldo, poniéndome su estampa bajo la almohada. A pesar de lo grave de la operación y de haberme fallado el co– razón dos veces, a las doce horas me encontraba muy restablecida, siendo po– sible que a los once días marchara a mi casa y siguiera haciendo vida normal. En agradecimiento, envío 200 pesetas para el proceso.»-María Agulló de Santapau. POR SEGUNDA VEZ SE OPERABA DEL CORAZÓN LAS PALMAS (Canarias).-«En un caso bastante difícil, por tratarse de una segun– da operación de corazón, sin grandes es– peranzas -según la ciencia médica- me encomendé de lleno al Siervo de Dios Fray Leopoldo, por medio de su triduo-novena, pidiendo su intervención si la Providencia lo estimaba conveniente. Nuestras súplicas fueron escuchadas surtiendo el efecto de– seado, por lo cual, en acción de gracias, lo pongo en conocimiento de Vds. y le envío una limosna de 50 pesetas.»-Sor Marina Blanco. DABA POR PERDIDAS NOVENTA MIL PESETAS MÁLAGA.-«Habiendo adquirido a una empresa constructora, el derecho a un piso, previa entrega de un anticipo consistente en 90.000 pesetas, se descubrió posteriormente que dicha empresa constructora se dedicaba a la estafa. A pesar de haber puesto el asunto en manos de un abogado de gran prestigio en esta ciudad, no se pudo conseguir le devo– lución del importe que le había entregado; entonces acudí a la intercesión de Fray Leo– poldo de Al pandei re, recibiendo la cora– zonada, o como se llame, de entrevistarme con la madre política del que era gerente de dicha constructora, que fue la que con– siguió, haciendo gestiones ante su yerno, para que me devolviera el dinero, habién– dome entregado el total. Debo advertirle que judicialmente no se consiguió nada por tener yo un documento al hacerle entrega del dinero, firmado por él, redactado en unos térm inos que no constituían elemento judicial con poder su– ficiente, según me había manifestado ya en un principio el letrado al presentarle el caso. Agradecido, envío 5.200 pesetas.»- A. C. M. A LA MISMA HORA MEJORABA MONTEVIDEO (Uruguay).-«EI domin– go 15 de diciembre de 1963 me dirigí al Convento de las Hermanas Clarisas a pedir oraciones por una sobrina que tengo en Roma y que se encontraba sumamente grave de una enteritis birósica. Los médicos no daban esperanzas, y además, si se salvaba, existía el peligro- de que las fiebres tan altas le hubieran atacado al cerebro, lo cual hubiera sido una verdadera tragedia, pues la nenita en ese entonces no tenía más que nueve meses. Las Hermanas me prometieron rezar y me dieron la estampa de Fray Leo– poldo, aconsejándome que le empezara una novena con la promesa de que si se salvaba mi sobrina enviara una carta para su proceso de santificación. 23

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