BCCPAM000522-4-48000000000000
PO obrar. Para animarte á ella y darte la esta- bilidad y firmeza en la virtud, que tanto ne- cesitas, te recordaré aquellas palabras del Eclesiástico con que el Espíritu Santo nos anima á la sabiduría, que en último término no es otra cosa que la fuga del vicio, el ale- jamiento del pecado y el cumplimiento fiel y exacto de la voluntad de Dios: «Inclina tus hombros y llévala á cuestas, y no te scan desabridas sus cadenas.» (Eccli., vi, 26.) Y como esto de proseguir hasta el fin sin des- “mayo ni quebranto en el buen camino co- menzado es para nosotros un señaladísimo favor del cielo y una prenda de vida eterna, pídeselo al Señor con Judit, diciendo: «Dame valor, oh Señor, y. favorece la empresa de mis manos.» (Judit, xm, 7.) Pídeselo con Da- vid, clamando al Señor: «Fortaléceme con un espíritu de príncipe. » (Psalm. L, 14.) O como traduce San Jerónimo «con un espíritu varo: nil y poderoso para que no vuelva más á pe- car.» El mismo Real Profeta te asegura que el Señor, accediendo á tu petición, «con sus alas te hará sombra, y debajo de sus plumas esperarás con confianza.» (Psalm. xc, 4.) Por lo demás, si correspondes con fidelidad á la gracia de Dios, Él te otorgará de día en día mayores favores, y tú, con su ayuda divina,
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz