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Novela histórica 407 —Es verdad. Como hicimos para darle la noticia. Tomó la pluma y lo escribió así: «Daniel Biren.—Guantánamo. Elisa saldrá para esa ¿qué día pongo?—le preguntó á su hija.— Cuanto antes. Pon el 26—el 26 dos tarde». Y él mismo llamó á un camarero y lo envió á la oficina de Co- rreos y Telégrafos. Elisa desde entonces á todas sus anchas pudo entregarse á la preparación del viaje. Hizo dos ó tres visitas por la noche á ciertos comercios. Otra vez saliendo sola en coche, entró en una Agencia donde le interesaba saber y tomar algo. Allí le dieron un papelito y dejó su nombre. dar. eu Martínez. Ya el 26 á la una y media había despedido á su papá con un cariñoso abrazo y más un beso. Ella no quería que la acompañasen al muelle sus papás exponiéndose á interrogaciones molestas para ellos de amigos ó conocidos. Lo mismo hizo con su mamá despi- diéndola sin mostrarle ningún resentimiento. Ya poco antes había enviado delante un inmenso baúl mundo guardando dentro la rica y llena arquilla. Veinte minutos antes de salir el vaporcito para Santiago, desde donde ella había de dirigirse á Guantánamo. ya estaba en el mue- lle Elisa acompañada de dos camareras. Pronto despidió á todos gratificando largamente á la servidumbre, ordenándoles volver y cuidar bien á sus papás. Elisa ya sola y desembarazada, puso un telegrama á Guantá- namo, y arreglándose con un cochero de alquiler, á la hora estaba ya ocupando su camarote reservado y distinguido en el vapor de la Compañia Trasatlántica. Luego cambió de vestido. Martínez no había llegado aún. Hizo llamar al capitán del barco para saludar- le, y le preguntó si auguraba un buen viaje. El capitán la satisfizo con toda delicadeza. Ella le correspondió dándole su nombre, L... Martínez, y brin- dándole su influencia y su casa para el regreso. Una hora poco más ó menos invirtió en sacar ropas, guardar los lutos y preparar á su gusto el camarote. A las cuatro, soberbiamente vestida, subió á pasear sobre cubierta, pero con la sola intención de ver si Mar- tínez había llegado ya, y se veía por alguna parte,

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