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Novela histórica 305 abrasadora sed. No se hundía el pavimento que pisaba; pero las paredes, los muebles, todo, daba vueltas y creía que el techo se iba á desplomar sobre ella sin dejarle tiempo ni voluntad para huir. Martina volvía ya á su escritorio para tomar la carta del Ge- neral y convencer á su marido de que estaba en contradicción con lo que decía Orlando. Entró y encontró á Raquel con ella hecha una estatua. Raquel había oído crugir la seda, pero no tenía mo- vimiento para entrarse en su cámara. No esperaba el regreso de su mamá. Martina extrañó mucho más tan inesperada escena. —¿Hija mia?.... —¡Ay mamá! Lo que falta en esta carta lo oí de viva voz desde mi lecho en tu última conversación con el General en la puerta de mi cámara. Martina no acababa de creer que su hija estuviese en pie ha- biendo leído aquella carta. Dudó con razón si la había leído. Creyó que nó, y la tristeza de su rostro la atribuía á la sorpresa de ser cogida infraganti. Por otra parte no le cabía duda de que la había leído, pues si bien ignoraba que Raquel supiese la última conversación, con el General, pero efectivamente, aquella conversación y esta carta se completaban. Por tanto, no sólo había oído la conversación, sino que había leído lo que tenía en su mano. En cuanto á sostenerse en pie, ¡Ah! si Raquel hablara diría: sólo me sostiene el pensa- miento de venganza que he concebido, sólo me dá vida la sed de sangre hasta saciarme. —Has podido notar, hija mía,—le dijo Martina con tierna y amorosa voz, creyendo la mejor ocasión para sacar partido —que al oir de tu boca la causa de tu gozo y al leer los dos escritos de tu hermano... -—Mamá—le interrumpió Raquel incontinenti—no llames ahora á Orlando como nunca le has llamado. —Y bien, te decía al verte rebosando satisfacción, he respetado tus gratas ilusiones; más ya que tú misma has dado con las prue- bas de su ficción, engaño y mentira, me proporcionas oportuna ocasión, para decirte que Orlando, por virtud propia de su papis- mo, es la quinta esencia de la hipocresía. —¡Imposible, maniá! ¿Orlando hipócrita? nunca lo ha aj 20