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— 18 — CAPITULO IV. DE LOS PENSAMIENTOS PENSAMIENTO en literatura es todo lo que el hombre pretende comunicar á su semejan- te de palabra ó por escrito. Los pensamientos para ser buenos en literatura deben ser cla- ros, sólidos, verdaderos, naturales, nuevos, (en cuanto sea posible) y acomodados al tono dominante de la obra y ocasión en que se emplean, Pensamiento claro es el que se entiende sin esfuerzo alguno, supuesta la aptitud cor- respondiente. En el caso contrario se llama obscuro ó enigmático. La obscuridad proviene unas veces de ignorancia en el lector, y otras de afectación en el escritor. Ejemplo: La vida es fugaz. Este es un pensamiento claro, é inteligible para todo el mundo. Por el contrario el si- guiente de Góngora es obscurísimo, más por la afectación del autor, que por falta de instruc- ción mitológica en el lector. Era del año la estación florida En que el mentido robador de Europa, Luciente honor del cielo, En campos de zafiros pace estrellas...etc.