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CA tes pasan tabajo del sols Dios did @ los oarer esta Ocupacion trabajosa para que se empleen en ella (1). Para dar hartura a esa necesidad imperiosa, es necesario que toda generacion tra- baje: y en efecto, san Paulino, tratando sobre lo que son los hombres en este particular y de lo que les cuesta la investiga- gacion de las cosas, dice estas notabilisimas palabras 4 Severo en su carta cuarta : «Considera lo que es esta vida de los mor- ales, y veras en ella la semejanza de la de un jumento, que “tabaja en una rueda de molino : pues asi como éste tiene que andar al rededor de la piedra con los ojos vendados con un pafio , asi aquel, levando los ojos de su mente tapados por los errores de sus sentidos , ha de andar el miserable en esta es- tacion trabajosa como al rededor de una piedra de molino. » A esta enfermedad de una ignorancia que es preciso escla- recer con la investigacion, va unida casi inseparablemente otra, y es:la del hastio.que se suele. tener de lo pasado, pues no gusta lo que hicieron otros, por creerse que lo que acontece en cada época no tiene relacion con lo que sucedié enténces por ser nuevo: y asi,seve que salen a luz cada dia nuevos modos. de investigar las leyes de Ja naturaleza , gloriandose cada, cual en sus inyentos, y diciendo lo que refiere san Agustin, que de- cian los fildsofos antiguos al-querer encomiar sus propias- aca- demias. « Estos hombres, dice. el Santo (2), trataron con mu- cha sutileza sobre virludes y vicios, dividiendo , definiendo, sacando conclusiones muy agudas,. llenando libros con. sus es- critos y publicando a grandes, voces su sabiduria, diciendo a todos que su escuela era la mejor, su secta la mas acertada , y que la siguiesen si querian ser sabios y felices. » Este vicio que san Agustin reprende en los: filésofos. anti- guos, es el\vicio de que adolecen todos los hombres, que mi- rando con menosprecio todo lo que les precedié, se empefian en (1) EBeele. cap. I. v. 13. (2) Trat. 45. in Joann, post init.

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