BCCPAM000432-1-30000000000000

p e den re pod ENS DR metiéndote monja, porque entonces no podras dar ni una estampa; mientras que, si perseveras en casa, toda ella estará á tu disposicion para hacer li- mosnas. Inés estaba de prisa y no qui- so contestar á su padre por lo cual se | quedó él diciendo para sí: Ya va ce- “a diendo: antes de medio año hemos ga- nado el pleito: Cómo va á resistir ella la tentacion de ser condesa de Monte- lirio? Cómo podrá sufrir sin quemarse las miradas de fuego de José? Y cómo no caerá en el lazo, si le decimos que tendrá á su disposicion todo un con- dado para hacer limosnas? Imposible, imposible! Y cayó la pobre Inés en ese bien tendido lazo? Esta pregunta se te ocu- rrirágle nuevo, curioso lector, y yo por toda contestacion te digo que leas el capítulo siguiente, si quieres que tu curiosidad quede satisfecha,

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz