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eternidad. Veiala, contempldbala, y deseando que llegase el tiempo de la reparacion humana, la Ilamaba diciéndola: Levdntate, date prisa, amiga mia, paloma mia, hermosa mia, y ven (1). Hablaba con ella como si estuviera ya presente; porque antes que naciese, la conocia (2) y la consideraba digna de ser su amiga por la humildad, su paloma por la caridad, y su hermosa por la castidad. ;Quién no se ele- va en la contemplacion de la bondad divina al considerar el inefable honor que le ha cabido 4 una pura criatura de -ser amada, querida y deseada por Dios para manifestarse al mundo por medio de las obras de su infinita caridad? ; Qué co- «Yazon no se abrasa en amor de Maria, al saber que sin ella reinaria aun en la humanidad lahorrenda noche del pecado, y no hubiera nacido el sol de justicia, ni hubiera descendi- do 4 nuestros corazones el espiritu de santificacion? Porque en verdad, la encarnacion del Verbo divino fuera decretada ~ antes de la creacion del mundo: mas no pudo verificarse hasta que no vino 4 él esta Virgen sin mancilla (3). Asi, de- seando el Espiritu Santo ostentar sin virtud en la obra mas portentosa del amor divino, y congratuldndose de tener en la tierra una esposa tan digna de él, se complace en ella y ~ Ta Tama para que con su aparicion pase el invierno de la culpa, germinen las flores de las virtudes, (4) y alegrdndose : él en sus obras, bafie tambien con torrentes de gozo espiri- (1) Cant. Cant. eap. 2. v. 10. *® (2) Autequam nascerer, illi presens aderam illi cognita cram, (Rupert Abb. in Cant. lib. I.) (3) Ante mundi constitutionem preedestinata fuerat in carnatio: ve- rum usque ad Mariam nondum inearnatione digna inventa fuerat officina. (Euthmi. de Laudib, Virgin.) s (4) Cant. Cant. cap. 2. v. 11.