BCCPAM000380-3-12000000000000
scion al mabe, aquellos ojos que enamoraron al esposo di- vino, (1) y son de misericordia para nosotros, por oir aque- Ila voz dulce, y por besar aquellas manos que cuidaron & Dios siendo _nifio,’ y han dado 4 la humanidad todas las gracias, con que se ha salvado? 4N6 suspira por ver las virtudes de aquel corazon, donde la humildad superé 4 las excelencias, la pureza virginal atrajo la fecundidad divi- na, y del cual saliS una resolucion afectuosa, humilde y tierna que produjo mayores portentos, que la voz misma de Dios cuando sacaba al mundo de la nada? (2) | jAh! Dios que mira las glorias de su madre como las sayas, coronaré la fe con que los hombres han creido los misterios de la concepcion de Maria, y de su maternidad y virginidad: el amor con que la han venerado, hacién- doles ver intuitivamente junto con su esencia divina aque- Ilas perfeeciones de Maria, que, dejéndola en el ser de criatura, la elevan 4 un rango medio entre Dios y los dn- geles: aquellas virtudes tan elevadas, que superaron en el primer acto 4 cuantas tienen todos los serafines y santos juntos al coneluir su carrera, y por fin aquel conjunto de belleza corporal y espiritual, que hacen de Marfa unmun- do aparte, y una especie de monumento que Dios ha que- rido erigir 4 su propia omnipotencia, adornandolo con to- das las riquezas, que pueden caber en una hechura de sus manos. ;O Dios debondad y de misericordia! Fué tan grande el amor que tuvo al hombre este Sefior amabilisimo, que, viéndolo excluido por su culpa de los gozos del paraiso, de- terminé hacerse hombre él tambien, y tener una Madre, para abrir con sus méritos las puertas eternas del alcdzar de su (1) C. Cant. cap. 6. ¥. 4. (2) Lue. cap. 1. v. 38
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz