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— 19— confesar a Jesucristo, razonable es que durante estos días enmudezcan sus símbolos. Otra de las razones por que no se tocan las campanas durante estos días, así como tampoco el órgano, es para manifestar el duelo y tristeza por la muerte del Salvador. En la Misa de este día se consagran dos Hos- tias mayores, una de las cuales es sumida para completar el sacrificio, y la otra se guarda en el Monumento para el Oficio del día siguiente, pues el Viernes Santo no se consagra. El Monumento Es un altar preparado con elegancia, en el cual es depositada la Sagrada Hostia que ha de tomar el sacerdote en los oficios del Viernes Santo. Antiguamente la Hostia Santa se guardaba en el mismo Sagrario en que está reservada de ordi- nario; y así se practica hoy día en algunas Órde- nes religiosas antiguas que no siguen el Rito Ro- mano, como, por ejemplo, en la de los Cartujos. Cuando aumentó en la Iglesia la devoción externa a la Sagrada Eucaristía, aquélla creyó conveniente rodear de mayor honor a la Hostia Santa, y para esto decretó que el día de Jueves Santo se prepa- rase un altar adornado con las alhajas más ricas de la iglesia, para colocar en él la Sagrada Euca- ristía, y de este modo recibiese los homenajes de todo el mundo católico. Con el tiempo se intro-