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waits: Wk el inmenso é infinito, 4 quien alaban sin cesar los serafines inclinfndose profundamente ante él, viene 4 mi pequeiiez, y se sepulta en mi pobre pecho, no sé de qué admirarme mas, si de la bondad infinita del que viene, 6 de la ingrata correspondencia del que lo recibe: porque veo que la dignacion es por su naturaleza infinita, como que Dios es infinito en todas sus obras; pero yo sé que soy limitado y mise- rable, y cuantas veces ofendo 4 mi Dios con adver- tencia, me esfuerzo & tener una malicia infinita, hiriendo con mi perversidad la santidad infinita, cuando debia desear amar 4 Dios con los corazones de todas las criaturas, y aun asi no le pagaria una partecita de sus misericordias para conmigo. O Dios mio, vos venis & mi con vuestra santidad, verdad y caridad. ;Y yo ob tie recibir sin aborrecer el pecado y sin amaros sobre todas las cosas? O Sejior, me con- fieso el mayor de los pecadores: pero creo que vos sois Padre de misericordias, y Dios de paz y de ca- ridad, y espero con vuestra gracia amaros desde hoy en adelante con todo mi corazon, con toda mi alma, y con todas mis fuerzas, ahora y por los siglos de los siglos. PUNTO SEGUNDO. Si consideramos atentamente lo que es la natura- . leza infinita y santisima de Dios, advertiremos que ni aun los mismos Angeles, que son purisimos por no conocer la corrupcion de la carne, no tienen una dignidad conveniente 4 la magestad infinita, si esta se dignase aposentarse en ellos: porque aunque sean espiritus, y estén adornados de tantas excelencias, siempre son criaturas: y jcémo una criatura cuitada