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— 328 — Considera con cu4nta constancia y perseverancia cumple Jesucristo lo que ha prometido 4 los hombres. En la Eucaristia esté dando gloria 4 su Padre como sacerdote eterno, y al alabarlo 4 él, ruega por noso- tros y nos bendice: desde alli, como sol de justicia, extiende los rayos de su luz 4 toda la Iglesia, dando sabiduria y fortaleza al que constituyé por su Vica— rio y cabeza visible de ella, para que ensefie 4 todos los fieles los caminos de la verdad y de la justicia, y destruya toda altura se levanta contra la ciencia de Dios: 1 desde alli tambien da ciencia y virtud 4 los Pastores, santidad de vida 4 los sacerdotes, hu— mildad 4 los fieles y caridad 4 todos, para que uné- nimes en la misma fe glorifiquen 4 Dios. ;Ah! No imitas ti en verdad esta constancia de Jesucristo, es andas vacilando en el camino de la virtud, y dando oidos 4 los maestros perversos del error, que se introducen entre las ovejas de Jesucristo, para en- gafiarlas con doctrinas lisongeras de la libertad in—- dividual, pero destructoras de la fe. Sigue, alma cristiana, con constancia por la senda del bien, y no dejes un solo dia de bendecir al Sejior, por haberte hecho nacer en el seno de la Iglesia Catdélica, Apos- té6lica, Romana, porque solo en ella hay caridad, ver- dadera virtud y santidad, y solo en ella hay salva- cion. O Jesus mio, yo os bendigo por esta misericor- dia, pues me habeis hecho esta gracia, que no han tenido tantos infieles, y paganos, y hereges, los cua- les serian mejores que yo, si hubieran tenido esta dicha. Sefior, ya que habeis empezado, continuad vos la obra, déndome la perseverancia final. Asi sea. 3 2. Cor. cap. 10. v. 5. : 4 a \ aaa Sia piaepbleal