BCCPAM000327-3-35p2d000000000
61 mucha leceion de moral y de mística: en estos dias desgraciados necesita ademas de mucha ins— truccion en doctrinas apologéticas para defender el dogma. Cada dia debe estudiar á lo menos dos horas hasta hallarse perfectamente impuesto, y despues no dejar munca-los libros de la mano. En cuanto á su trage, rezo divino y demas obliga— ciones, gobiérnese por el librito titulado Regula Cleri, que es un compendio de las leyes de la Igle- sia, que se ordenan á st conducta, y no olvide la preciosa obra del P. Molina escrita espresamente para que los Sacerdotes llenen y conozcan sus de_ beres. El Padre de familias 0 la Madre rodeada de sus hijos, es menester que entienda que Dios quiere su propia santificación en medio de los cuidados é inquietudes que trae consigo el estado. Hará mal si se distrae á otros objetos, por san- tos que sean , con detrimento de su primer de- ber: este consiste en- educar á sus hijos santa y prudenlemente. Para lo cual ténganse presentes las siguientes reglas. Primera. Que Dios les ha de pedir estrechísima cuenta de las almas de sus hijos, y por tanto que su instrucción en la Reli- gion y en la moral, sus costumbres en órden á lo. que proctiquen para agradar al Señor, sautifi-
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz