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143 hablando de la conducta de la casada; del sa- cerdote, diciendo sus flaquezas. á otro ú oyéndo- los contar: de calumnia, levantando de su ca- beza olguna moldad para achacársela á otro que no la ha cometido: ó. descubriendo un pecado oculto que nadie ó pocos lo sabian: de menti- ra ya diciendo una cosa por otra por hábilo, ó ya para engañar al prójimo: de ironía, diciendo espresiones con cierta segunda intencion, que da- ñan mas que si fueran de clara murmuracion, como Y. g. «Fulano visita á fulana, no será,pa» ra rezar el Rosario juntos.....» Esta es una ito- nía que lleva consigo mucho veneno; de adula- cion , como al que nu está en ánimo de enga- har á una jóven, 6 aunque lo esté lo anime di- ciéndole: «Sf, hazlo, porque asi podrás llegará conseguir casarte.» Al que no, está en ánimo de robar: «Mira, roba 4 fulano, que es un misera- ble:» Ó escitando á. los hijos de familia para, que roben á. sus padres, y si en, efecto se mueven por estas razones á ofender 4 Dios y robar; el que las dice tiene que. restituir; tambien es a= dular alabar al que ba pecado. por cualquier cla» se de culpa, Todos los. que.en vez de corregir animan con sus palabras á-que Dios sea. 0r- fendido, sehacen reos. de. los mismos pecados,