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> E - br” Sodoma, Gomorra y demás ciudades de la Pen- tápolis una espantosa lluvia de azufre y fuego, arra- sándolas enteramente. Picada de curiosidad, la mujer de Lot volvió la cabeza hacia las ciudades incendia- das, y en castigo de su desobediencia quedó allí mismo convertida en estatua de sal. 16. Obediencia de Abraham. Según lo había anunciado el ángel, Sara tuvo un hijo al año siguiente, y púsole por nombre Isaac. pe j Y) e qe a, El sacrificio de Abraham. Siendo éste de edad como de veinticinco años, dijo Dios á su siervo: «¡Abraham, Abraham! toma á Isaac, tu hijo único, á quien tanto amas, y vé á ofre cérmele en holocausto sobre el monte que yo te mos- traré. » Levantóse Abraham muy de mañana y pú- sose en camino para el lugar del sacrificio, acompaña- do de Isaac y de dos criados Cuando divisó á lo lejos el monte Moria, ordenó á éstos que le esperasen á la falda, mientras él y su hijo subían á la cumbre. El hijo cargó la leña, y el padre llevaba el cuchillo y el