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— 220 SA 39. Negaciones de Pedro. Ansioso Pedro de saber qué iba á ser de su divino Maestro, siguióle hasta el palacio del Sumo Sacerdote en cuyo atrio se quedó á calentarse en compañía de unos soldados junto á un brasero, muy ajeno de sos. pechar que la sirvienta del Sumo Pontífice, mirándole atentamente, le delatara, diciendo : « Tú estabas tam. bién con Jesús Nazareno. » — « Mujer, ¿qué dices? No conozco tal hombre, » respondió Pedro. En aquel mismo instante cantaba el gallo. Pedro niega cobardemente á Jesús. Al poco rato aumentaron su temor y turbación las voces de otra criada, que decía á los circunstantes: «Este es también discípulo del Galileo. » — Por se- gunda vez lo negó Pedro, diciendo con juramento: «No le conozco, ni sé lo que dices. » Una hora después llegaba al mismo sitio un pariente de Malco, y decía con gran sorpresa de Pedro : «Tú eres discípulo de Jesús ; ¿por ventura no te he visto yo en el huerto ? Además, tu habla da bien á conocer que eres galileo. »

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