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— 16 dijo: «Si eres Hija de Dios, échate de aqui abajo, porque está escrite que Dios mandará á los ángeles que te tomen en las palmas de sus manos, y na tro- piece tu ple contra las piedras. » — lambién está escrito, replicó Jesús, que no se debe tentar á Dioz, Finalmente, Satanás le condujo á un monte elevada, Jesús es tentado por Satanás. y mostrándole todos los reinos de la tierra, le dijo: «Te daré cuanto tus ojos contemplan, si, postrán- dote á mis pies, me adoras. » Pero Jesús le respondió : “Apártate de ahí, Satanás, porque escrito está: Adorarás al Señor, tu Dios, y á él sólo servirás. » Aca- badas estas tentaciones, Satanás se apartó de Jesús, y viniendo los ángeles, sirvieron de comer á éste. Jesucristo se dejó tentar de Satanás para enseñarnos á re- sistir, á ejemplo suyo, las instigaciones de los malignos espíritus. Satanás no tiene entrada en el corazón del hombre, mientras éste no le abra la puerta, la cual se conservará siempre cerrada, si el hombre invoca humildemente el auxilio de Dios y huye á la vez de las ocasiones de pecado. y PE m AGA A ds E ct , “q == 1] y