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y Comunion, Trat, 17. _ 129 guridad ó consuelo y sosiego interior, A esta duda y escrúpulo, en que sin fundamento verdadero, tales almas se andan inquietando, responderé con es- ta doctrina admirable de Sanchez, que refiere el V. P. Gavarri en sus Instruc- ciones añadidas, fol. (mibi) 214.2. 279, el qual dice asi: Despues que uno se exáminó diligente y se confesó de todo quanto se acordó, no tiene despues obli gación á pensar mas de la vida pasada; y si alguna cosa le ocurriere á la menos ria de la vida pasada que le parece no lo explicó bien: puede creer que lo ex- plicó bien, y no bacer caso de ella. Ita, Santius. desp. 4. núm. 18. Esta Doc- trina (para mas seguridad en la prácti. ca (la pongo á los Señores Confesores, para que segun su prudencia y lo que exáminaren en los Penitentes, usen de ella y la apliquen quando se ofrezca, conforme á la necesidad de las con= ciencias, Verdaderamente, que es de grande alivio, asi 4 Confesores como á Penitentes ; como yo lo experimen= tado; pues si en esto no hubizse algun medio para sosegar estas polvaderas interiores, y en qua!quiera escrúpulo I (sin