BCCPAM000258-3-12000000000000

: t fe i & 331 independencia para gobernar su Didcesis y ensefiar 4 los fieles, ganan en muchos grados los Obispos que viven entre Tate" y en muchos paises protestan- tes, 4 los que lo son en naciones catdlicas. A tal es- tado ha intentado reducir la revolucion al Vicario de Cristo. jInsensata! Hay escritas dos palabras, que dicen: non prevalebunt; y estas palabras se han de cumplir. jeres, se hacen sin ningun obstsculo, y pueden poseer y ad- ministrar, La ley no exime a los clérigds del servicio de las armas; pero el Obispo puede hacer que se declare exento al que le plazea, Los Cabildos eligen sus Obispos, y el gobier- no colma de honores y, consideraciones a los electos:.el ju- ramento del Clero se reduce & una visita amistosa del nue- vo Obispo al rey, que lo recibe a solas y d puerta eerrada, Nétase una especial predileccion del gobierno prusiano hd- cia las poblaciones catélicas de Westfalia, y de los paises del Rhin, En Berlin mismo, confia el gobiernd la etretcion reli- giosa y urra parte de la administracion 4 los catélicos mis decididos y mas instruidos de aquellas provincias, En cuan- to pueda rozarse‘con la Iglesia, ‘nada hhace ni emprende, sin pedir antes consejo, exigiendo que se le diga lo que es hace- dero, y lo que no Jo es: de esta’suerte, consultados los caté- licos mas influyentes de Berlin, mds’ de una vez han evita- do medidas odiosas, y obtenido decisiones muy titiles para la Iglesia. En una palabra, la Iglesia se halla en Prusia en una situacion por muches titulos muy preferible d la que han creado los gobiernos en otras partes de Europa.» Pensamien- to Espaiiol, 23: de Enero de 1871, pag. 1.*, col. 5.9) Dejamos d cada uno ‘el cuidado de formar éiicheueavibe sobre este es- crito, sobre todo, comparando cosas de actualidad que abun- dan por desgracia,