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254 hombre 4 su Sans natural exterior; si algo ahade para fomento de su vanidad, todo. es postizo y pres- tado de otros séres. Y si nada puede en lo exteri ior, mucho ménos en lo que constituye su esencia y na- turaleza de ser racional. Sin embargo, esto es lo que enseiia esa filosofia impia, constituyente del hombre en sociedad racional, despues de haberle dado un ori- gen. y una procedencia enteramente brutal. Y zno sabria esa filosofia decirnos, por qué.arte de encanto no fué progr esando el hombre por la misma linea que él se traz6? Si did un salto desde ser engendr ado pu- ro animal, hasta ser raciohal, ze6mo no ha dado si- quiera un paso para ser puramente espiritual, 6 pa- ra no bajaral sepulero; 6 siquiera, ya que se pulid tanto al principio, para hacer que no hubiera un so- lo hombre, que né fuera tan hermoso como la figura delineada por un Apeles, 6 la estitua esculpida por Fidias? itt | WPTio _ Hay una distancia infinita entre esas invenciones de la mentira, y lo que Dios nos enseiia: en esta ensefianza divina se nos dice expresamente que Dios ha constituido al hombre en sociedad, basando la esencia de esta en leyes inmutables y eternas; y por consiguiente, por la misma ensefianza esti reproba- do ese axioma nuevo de. la revolucion, del derecho que tienen los. pueblos i constituirse. Veamos con | qué filosofia, tan sublime y tan social, el apdstol San Pablo explicé en el areopago de Atenas losprincipios constitutivos de la sociedad: Dios, dice, hizo de un hombre todos los demis, todo el linaje humano, para que habitase por toda la haz de la tierra, dejiniendo los tiem- pos establecidos, y los limites de su habitacion, para que buscasen d Dios... que no esta léjos de cada uno de nosotros;
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