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Soletaentanieaneniane . r —— eee ee : anoregiaannmeigl - ey a partner ear or om ee pn z bs % = ee nen nee 7S eee 12 tejida con el laconismo miajestuoso del rey, y eon la dignidad incomparable del Pontifice. Despues, guiado por Ids iuces: de la inspivacion y por las reglas de, la filosofia mas isialta que hay en la tierra, el Viea- io. de, Cristo, entra formar apreciaciones sobre lo que: veia con sus propios ojos, penetrando.con los de su -entendimiento: ‘en. el oscuro, laberinto de males, que iban & caer sobre su ciudad amada y sobre las cosas ‘santas, como. ya lo ha visto el mundo. espanta- doide tanto. sacrilegio, «gQué cosa mis triste pudiera acontecer para Nos, y para todos los fieles, continia diciendo, el Padre Santo, que ver en ese dia plagada la ciudad santade, mtn de facinerosos venidos, de Oo eahdcden, insultadacon Waewaboniiles persona, entr egaclas cata ain las. tropas, fieles que. ‘Buarnoeian Ja ciudad, triunfantes la licencia y petulancia mas deseufrenadas, alli. mismo, donde poco antes se habian aglomeradoinnumerables gentes para consolar; con afecto ,filial a su. comun Pa-, dre, inundad: as,las, calles, de libros obscenos ¢.im- pigs, de efemérides publicas, que rebosaban ea.des- precios y calumnias de la religion, y tenian por, ob- jeto exaltar los animos contra Nos y contra esta San- Sede, Apostglica, presentadas por todas partes pin- turas obscenas y abominables, en las cuales se envi, lecian,las cosas y las personas mis sagradas, gol pear, dos y heridos los sacerdotes, sujeto 4 pesquisiciones, Nuestro palacio del Quirinal, violado el domicilio de, las. virgenes consagradas, i Dios, y arrojados de su, habitacion los oficiales de Nuestra camara, los furni- liares de Nuestra casa, y basta un Cardenal de la Santa, Romana Iglesia?»

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