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por la tarde. 433 para que ella no te falte, y te te la mano en todas tus necesi- dades, tentaciones y peligros. MAXIMA. para la tarde del decimo dia. CAPITULO VI Sobre buir la precision , fragosidad y negligencia. Le primera y mas importante de nuestras devociones ha de consistis en hacer aquellas accio- nes, que nos pide y obliga nues- tro estado $ porque rantas quanras ellas són , tantas veces se nos expresa en ellas mismas la volun- tad de Dios , como anexas d nues- tra misma vocacion. Y como en dl exercicio de estas consiste la perfeccion , asi principalmente so- bre ellas deberémos ser Juzgados. No debemos con todo eso. ocu- parnos tanto en hacer aquel biert que quiere Dios de nosotros, quañ- LO”