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290 cen que al tiempo que el Niño Beng;. tísimo. salió del «Vientre de su'madre le recibieron los Angeles porque no caye. se en tierra,y adorandoólo con suma re. yerencia lo pusieron en los brazos de -su Santísima Madre. No se puede es. licar el gozo que sintió la Purísima Virgen con la primera vista de este pu. yísimo tesoro, considerandole como pe Dios le adora con humildad profundí. sima y como á su Hijo le abraza con ternura, y besa: amorosísimamente en. volviendole..en. pobres pañales y man- tillas que tenia preparadas, y púsoleá los pechos llenos de leche celestial, y poco despues en un pesebre porque no habia otro lugar desocupado á donde reclinarle; ni aun este estaba del todo porque comian en él un buey y un ju- mento, los cuales viendo la hermosura del Niño se postraron en tierra, y le reconocieron por dueño y Señor, y le calentaban con su aliento. Puvo alli por cabecera una piedra. Alli adoró 4 el Santisimo Niño el Santo José con alec- tos devotisimos, y amorosos agradecien- dole la merced que le hizo en tomarle por su ayo y fiel guarda y ofreciendo- se á servirlo toda la vida con mucho