BCCPAM0001173-3-0400000000000

49 ~ yoria de los que son deportados hoy por asuntos politicos son hombres educados con finura , acostumbrados 4 una vida regalada, 4 tener buena mesa, buena cama, & verse asistidos con esmero en sus enfermedades, y aun en sus dolencias pequefias : y cree’ V..E. que estos desventurados resisten it tendidos en el-sollado de un buque, comiendo el ranchode un deportado? gCree V. E. que podran resistir mucho tiempo en un clima abrasa-. dor, situado debajo--de la linea, junto al Africa, alli donde no han vivido, hasta hace pocos aiios, sino fieras y algunas tribus desalvajes? ; Ay! Estos desgraciados van con toda seguridad 4 la muerte. No debe el Obispo entrar en otras consideraciones, porque la alta penetracion de V. E. las conoce todas; pero. el padre de los afligidos, cual debe serlo quien ejerce el ministerio episcopal, tiene derecho & presen- tarse ante los poderosos del mundo 4 pedir por los que lo estan ; y esto es lo que hago yo, Exemo. Sr. Ruego a V. E. que mire con piedad 4 tanta viuda como va4 | causar la deportacion, si los deportados son detenidos en las mortiferas hondonadas de Fernando Poo: ruego 4 V. E. que estienda una mirada de piedad 4 tantas ma- dres amantisimas de sus hijos, y venerables algunas por sus virtudes, de lo que puedo dar testimonio, las cuales, asi como sus hijos y nietos, no hacen mas que lorar desde hace un mes. Pido, por fin, 4 V. BE. que conceda 4 todos estos mis hijos siquiera una amnistia relativa, cambiando el lugar de su residencia y man- dando que vayan 4 otros puntos mejores, pues la Es- pafia es muy vasta, y sus islas adyacentes son muchas. j Ay! Bastante desgracia es para el desterrado el no ver el horizonte de su patria : bastante desdicha es para el hijo no oir la voz, siempre tierna, de su madre, para el esposo el tener que decir un triste adios 4 la compa- fera de su vida, y verse en el duro trance de mezclar : 4