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43 cia los males que se siguen 4 consecuéncia de la insur- reccion que sé ha intentado llevar 4 efecto en una gran parte de esta Isla, y cuya estincion total no duda que conseguiré V. E., asi como ha tenido la gloria de Te- primirla casi en todas partes. Los medios empleados por V. E. para lograr este objeto revelan un tacto que no puede menos el observador justo de llamar delicado y esquisito, pues ha moderado V. E. la justicia con la clemencia, y ha llevado casi 4 feliz resultado la pacifi- cacion del pais, recibido en malas condiciones, mas 4 fuerza de prudente espectativa y de medios de conci- liacion , que empleando en ella el rigor de los castigos y el fallo inexorable de las leyes de la guerra (1). Al ser testigo de los trastornos que algunos hom- bres mal avenidos con el érden actual de cosas causa ban en esta Isla, promoviendo levantamientos injusti- ficables, el Obispo, amante como el primero del honor de su nation, nada mas podia hacer que rogar 4 Dios con lagrimas y gemidos del corazon que tuviese piedad de su pueblo, inspirando 4 los alzados sentimientos de sumision 4 la autoridad y de fraternidad para con todos los que llevan sangre espafiola en sus venas, ora hu- bieran nacido aquf, ora alli, dando valor y abnegacion a los soldados y voluntarios que tenian que salir 4 batir i los enemigos del érden, y prudencia esquisita4 los que han sido llamados por la Providencia 4 llevar‘ las riendas del gobierno en estos momentos verdadera+ “(I) En efecto: el general D. Domingo Dulce, animado de los mejo- res sentimientos, hizo dos cosas, que parecian buenas en si, ssenafldas las circunstancias, aunque una y otra salieron al reves de’ lo oa él pens6. La primera fue conceder las libertades establecidas ultima- mente, y én especial las de la prensa; la nda, conceder la amnis- tia mas amplia que se ha visto jam4s, sefialando cuarenta dias, Pero fue tan abominable el abuso que se hizo de Ja prensa, ape _tuvo que cortarle de raiz, retirando lo concedido. Por otra parte, los insurrec- tos, en vez dé volver 4 su deber, unos se aprovecharon del armisticio para armarse mas, y.otros, inficionados en la idea de hacerse inde- pendientes, se marcharon 4 engrosar las filas de los rebeldes.