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: 308 antes. No quisimos desmentir por medio de otro perié- dico los absurdos 6 inexactitudes del diario chismoso, ora porque ningun hombre formal toma por lo serio lo que dicen ciertos periddicos, ora porque creiamos que era una degradacion de nuestra dignidad, no de Obis- po, sino puramente de hombre, el tomar la palabra alli donde tanto se abusa de la libertad de escribir. Para esclarecer las cosas, recordaremos aqui que cuando salimos de la Habana en octubre de 1869 para ir al Concilio del Vaticano, estabamos combatiendo _ como pro aris et focis en defensa de los derechos de la - Iglesia. La cuestion se resolvié contestando 4 las co- municaciones que constan en los siete documentos que hemos puesto arriba, mandandosenos por comunica— cion del 12 de octubre que en. término de tercero dia saliésemos para Cadiz, donde nos esperaban las escenas que quedan descritas. Tambien recordaremos que sabemos positivamente, que existen logias secretas en-Cuba, y diremos que, precisamente al poco tiempo de haber salido de la Ha- bana, el Gobierno sorprendié 4 horas avanzadas de la noche una de estas, en la cual habia, entre esos herma- nos, un sugeto que habia hecho un papel muy princi- pal en un asunto ruidoso , el de dispensarse proteccion y amparo 4 un sacerdote cismatico, por cuya vida san- ta y regularidad de costumbres y profesion de a vir- tud de la justicia abogs como puede abogar un her- mano por otro; y no ignoramos que pocos momentos antes de ser sorprendida esa logia salieron de la reunion masonica dos individuos, que en ningun caso deberian franquear los dinteles de las puertas que conducen 4 los lébregos retretes, donde se conspira contra toda autori- dad, y sobre todo contra la de la Iglesia. Tambien recordaremos que, desde hace ya algunos afios, existen otras logias que estan en perfecta inteli- SE A iat MBB A A od De Sia RUS ARERR AE ae IE - -