BCCPAM0001173-3-0400000000000

26 querer entender, cada cual 4 su manera, las santas Es- crituras, bastardeando su sentido segun sus caprichos: lazos, laberintos y contradicciones de doctrinas; inca- pacidad para levantar los ojos al cielo y contemplar con la fe lo que pasa entre Dios y sus Santos, y las relacio— nes de caridad que median entre la Iglesia militante y triunfante, inclinacion hacia la tierra para no ver mas que lo terreno, ni aspirar mas que 4 poseer oro y como- didades para el cuerpo; hé ahi el judaismo; hé ahi el protestantismo; hé ahi el indiferentismo, y hé ahi el sistema social de los que, llamandose catdlicos, quieren un catolicismo 4 su modo, é intentan hacer de la insti- tucion divina de la Iglesia catélica, una institucion tan terrena y tan transitoria como las sectas de los herejes. _ VII. Por tanto, debe aumentarse-en. nosotros la fe y crecer la esperanza, al ver que la Iglesia invoca la in- tercesion del glorioso. Patriar ob ado el Sefior sus ruegos, nos coat en esta onal ai = ogee salié aquella gloriosa heroina del catolicismo, Santa Teresa de Jesus,» ¥y que en sus escritos ensalzé las escelencias del Santo Pa- _ triarca, propagé su devocion, estendi 6 su culto, y hablé como gran Doctora, del poder que tiene en los cielos y en la tierra por el valimento, de que goza con el Rey de los siglos Jesucristo, exhortando 4 todos 4 que lo in- voeasen en sus necesidades, seguros de obtener de Dios lo que le pidiesen por su intercesion para gloria del mismo Dios y salvacion de su alma. Ni es menor el motivo que tenemos para alegrar— nos al habernos concedido nuestro Santo Padre la gra- _ cia de que celebremos en todas las iglesias de Espaila el dia 31 de mayo la fiesta de Za Reina de todos los Santos, Madre del Amor Hermeso, para coronar la

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz