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{ XXVIII ) ,:·J•.ero-t 1 olviendo á coger él hilo de nuestra reseña será del caso advertir:: qué á pesar del mucho tiempo.transcurrido dssde el dia en que se pre– s~ntára la pr,0testa, el Ayuntamiento se negaba siempre .á dar resolucion alguna .sobre su contenido y mucho mas á dar á los interesados el testi– monio que de aquella solicitaban. Sabían estos sin embargo, que los tra- . bajos de aquel Cuerpo , tocantes á la nueva plaza , no cejaban: que las conferencias con los Arquitectos de cuartel y los propietarios se multi– plicaban cada dia , y que á pesar de la pericia de los primeros y del buen deseo de los últimos, no era posible entenderse. En este estado el nego– cio, trató el Ayuntamiento de probar fortuna y dirigióse el Gefe Supe– rior político, en solicitud escrita de api·obacion para su favorito proyecto; pero como los dibujos correspondientes al mismo se hubiesen quedado en la exposicion dsl Salan de Ciento, aquella Autoridad hubo de·decirle que ignoraba el modo de aprobar unos planos que no se le habían en– viado. Con semejante fraterna, fácil es calcular .cual partido tomaría el susodicho Cuerpo; apersonóse su Comision de obras con la Autoridad referida; y llevando por esta vez los planos, dejólos en poder de la mis– ma al efecto de resolver lo que creyese mas justo y conveniente. Poco tardó en llegar á noticia de los propietarios de la calle del Vi– drio, todo cuanto acaba de referirse; supiéronlo tambien luego· los ArM quitectos que hahian firmado la protesta de 28 de agosto, y unos y otros resolvieron acudir al expresado Gefe, sin esperar la contextacion del Concejo. En 5 de setiembre siguiente los últimos , y en 11 del mismo mes IÓs ·primeros, presentaron su e'X:posicion razonada, esperando que el buen criterio y rectitud de dicho Gefo, harían al fin justicia á su de– manda (22). Nó esperaron en vano los propietarios: pues antes de ocho dios declaró el mismo Gefe .que en atencion á las razones que se le ha– bian expuesto, en el .recurso presentado por aquellos, babia creído con– veniente no aprobar el plano qae ·se le acompañaba. Menos afortunados los Arquitectos, vieron con sorpresa que la misma Autoridad, que'.habia conocido la importancia de respetai' la propiedad urbana , se babia ne 0 ( 22) Véase al fin el Documento n." 0 '12, pdg. 80.