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( xxvu ) hubiera .. bastado para. abrir los ojos á los Concejales á quienes se dirigía ·,eSte,:-escrito ;- pero en nuestra España, donde las anomalías son tan fre·– cuentes, era ·condicion precisa que todo lo contrario sucediera ; y así hu– hO--.de ·verificarse en efecto, Tomando sobre sí el Ayuntamiento una res;.; ponsabilidad agena, propia tan sola del Tribunal de quien se babia ase- . sotado·, su posicion cambió uecesariamente; y en sentir de la opinion pú·– blica, se le hubo de creer empeñado en el sostén de una idea que por herróoea y.descabellada, babiale envuelto en grave compromiso. ¿Y ,·có,910 no pensar de este modo, cuando en vez de renunciará esta idea, estµdiaba aquel Cuerpo los medios de neutralizar los efectos de una oposicion tan viva como justa? Diráse , y se ba dicb·o, que su honor á ei,lo•le;obligaba, pues habiendo dado su asentimiento al proyecto apro– •~ado:por los jueces, hubiera sido mengua para él, volver atrás en su ,a:euerdo; pero los que tal digan y hayan dicho, será preciso que confie– ·.'sen_; tCJUe si este precedente se· admitía, las consecuencias de su admision füeran fatales. ¿Y quién lo duda? Cuando una Corporacion, lega en • ·tni:'asunto, obra .conforme al parecer de personas aptas para entenderlo, ó que deben considerarse·tales por lo menos. ¿pudiera bacérsela respon– sa.ble de los males que se sigan de lo erróneo del dictámen? Cuando ha– jo4?s planos y direccion de su Arquitecto, levanta el Concejo una obra. ~er:Ual ·vez. responsable de los daños que á sus fondos se irroguen por ~fror,,Cn .dichos planos, por descuido ú abandono en la ·aireccion exp're~ soda.? Y á dónde fuéramos á parar. admitiendo tal principio? Quién .¡µisier.,t :aceptar. ninguno de los ca,·gos públicos, que á la calidad de gra– .tuÍtos,jucitasen la de responder de los perjuicios que al procomunal se \C~q-sa,Sen·,-JlOr quienes tuviesen la mision de evitarlos? Fuerao Regido-.:: .. wesiá'<ta>1'precio, los que forman hoy el· Cabildo? Todavía mas: cúaudo t ¡¡u»Cue:tpo ó un particular reconoce el error en que ha incurrido/»no V '.:u!ifra,cuer.damente, procurándole la enmienda? No se ha dicho de inuy j~¡ :>»íii~igu_o¡ ¡que.es •de hombres advertidos el cambiar de dictámenlPor toi i'" ··::;~J\S:-é~t.hfriiiones, creemos que hubiera sido mas honroso .pa'ra•:.ei !:·:.4:-:yur¡,;;. )t~iniento, confesar el error á que le indujo un fallo precipitado é :J8.: que no empeñarse en sostenerlo á despecho de lo que dictan

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