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de CantalicioCap. 12. 12% tuscantiones infulías, fin modo, niarte, con pe provocas la gente a vomito, fiao pro- poítico de alguna monfiruelidad , que ha de parar [ ino le remedia Dios Jen efcandalo pu- blico ¿Que puede juzgaríe de la libertad, con ue vivesfolo por la le y de tu arbitrio propio, fino que deíprecias, y agravias al miímo paño la autoridad de la diíciplina R eligioíarY lo pe- or es, que ni te remuerde la conciencia, ni ve- mos que tratas de emendarte. Dixolo con 1á- ta aípereza, y leveridad,q los circunítantes .«deípues de oirlo no poco admirados, pulieron Juego los ojos,y la atencion en el ficrvo de Dios, para notar lo Gavia obradoen fu animo porel femblante, y por la refpuefta. Y lo que DOtaron, no con menos admiracion, vino fer,que el lanto muy gozofo, y muy lofegado le reipondio:O Padre,que inigoes beneficios ae acabas de hazer en los flaludables avilós que aqui me has dado! Y quanto deve fermi 3econocimiento por la obligacionen que que- dodeíde oy |! Af lo conficilo, y te doy mu- <has gracias Defta manera recibió tan grave célura,y manifeñió la execliencia de lu virrud. - -Noesinferiorexemplo de lu pacientia lo 4 de fucedió otra vezen Rema.lba por un bar- sio della, que fe llama el Valle, cargado de jat- sosde vino, Y aviendo llegado juatoá unas Ly bigas,