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3 quiedah. tomo difuntós «al oirlo. Viendo, como V.M, difsimula el alto dolór que Ja martiriza,dude fi la fuerza de-cl fentimiento la havia convertido en piedra , para fervir de eftatua, y memoria a la Mageltad difuntasporque folo afsi podia lograr fu difunto Efpoto la reprefentacion mas viva; pero entendiendo que en fu retiro forma el altar de las lagrimas, me firve la noticia de confuelo, por faber que no esinfeníible quien aísi fufpira, y lora, Muy de insento repito en eflta dedicaftoria la voz de nueltto difunto ReY 5 por qué filas piedras de el dificr- to, heridas á repetidos golpes, fupieron deshazerfe en aguas , feria dichaen fi , el ver que con la repeticion de mis difcurlos,llorafle tanto lamas preciofa piedra de elle augufto retiro, que llegafen 3 fer fuentes delagrimas fus ojos , O bienpara aliviar fos fentimientos , O para que derivadas de ella eminencia 4 los valles de elta Monar= chia,recivieflen con fuelo los que lamentan el.reriró.Tres Reynados en diveríos tiempos defcrive mi pluma enla exemplar vida de nueftro Rey difunto,manifeftando,que haviendolo elegido Dios para reynar en Efpaña , reynó por fu padre ,reyno por fu hijo, y reynó por si miímo, Por fu padre,antes de reynar; por lu hijo, delpues de has ver reynado: y por simiíimo, quando renuncio lu Cetro. En el primer Reynado, fue dechado de Principes. En el fe- gundo,embidia deMonarchas. Y finalmente en el tercero, admiracion de los Pontifices; pues viendo la Cabeza de la Iglelía. una tan clafica renuncia en la mayor opulencia, en la mas florida edad , y en la tranquilidad masálta, le ad-