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93 SERMON V. yeinte y dos Ladrones, que _afsiftieron a2el, fin animo de mudar de vida ; quando vémos, que la Mageltad de Chrifto entodo el tiem- po que eftuvo predicando, no pudo convertir fino 4 uno, en la hora de la muer- te , quando yá no tenia cl- peranza de proleguir en fus -robos;y es,que la fuerza de Ja rherorica, y eloguencia _deS.Antonio pudo tanto en Suscorazones , quelosmu- do en otroshombres.Elte es el efecto, y fruto que confi- gueFacultad tan noble;por- que, como dice Laftancio, — a > re. p" a E 4 la Oracion concertada [e , oyeson aceptacion; la que 7 “no lo es,con enfado, Oida 1 con aceptacion, fe abren ie Jas puertas del corazon, y He del animo, para quelael- A ll Fa cuchen. Oída con enfado, fe cierran eltas puertas, pas ra que no refuene, y como el efecto, y fruto confiíte en poder entrar q dentro; de ay es, que entrandocon =p. San: Antonio , logro en aquellos corazones un frus to tanrepentino, y copid. Lafñríc. Lo. Perfuadet autem quid- im. quid fuave e4,Ó animo po- ib. 6. tius dam drleítat 1nfídet. Divin» Ifajas rendia muchas gra- inflit. ciasal Señor, por haverle dotádo de una erudita, y EN QUE SE ABR tanto guíto la Oracion de . a eloquente lengua. Domin»s -dedit mihi linguam erudita, Pues era dorado anzuelo, con que atrala los corazo.- nes.Tan erudita,y eloquen «te ,dice Vbadingo, era la “Jengua de mi Antonio, que -todo el mundo quedo á fus “voces, nofolo admirado, fino tambien commovido. “Dicendi fapientia, O" copia mundam in fui admiratio. nen commovit.Hafta la ves _nida del Efpiricu Sánto,no. ta el Chrifoftomo, que no tindió Chtifto dá todo el mundo. Mandum fubjuga- vit Spiritus deC celo inApof- tolos defcendens. Y enton= ces, porqué? Refponde; por que vino en lenguas. Ha- “blaban los Apoltoles con “lenguas del Cielo , y con- quiftaron la tierra. Lo ma. ravilloío de aquellas len- guasera, el que todos los hombres entendieflen lus voces 47 la maravilla de la lengua de San Antonio era, que la encendieflen los Pe- zes. Hacer los hombres co- mo los Pezes yá lo he oido en Abacuc;pero hacer ¿los Pezes, que oigan, y entien- dan como los hombres, [o- lo fe halla en San Antonio. 2. Vilta yá la urilidad de la Rhetorica, rella pro. poner las partes de que (e compone.Quintiliano dice, Mati $0; | A V. 4 Homil, 66. in Math. Pl rra que ¡