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armas de que muchas veces, -y mas en nuestros dias han querido válerse pon destruirlos y acabarlos.- > ¿Pero puede servir de elogio 4. has Reyes Padres un amor paternal, en que rece tubo mas parte la naturaleza que la virtud? Si Señores : y esto debe ser- vir de consuelo al acerbo dolor de nu- estro Soberano que les Mora. Un cora- zon que ama lo que debe amar, siem-= pre es digno de elogio ¿y no «puede de- jar de ser virtud el cumplir econ las obli- aciones dela naturaleza. Además de que los Reyes Padres amaron á los Príncipes sus hijos, como Padres , como Reyes, y Co- mo Cristianos. No era su amor como aque- Has vulgares expresiones , á las que des- honra la flaqueza, y en las que áfuer= za de darlo todo el amor, nada se dá 5 la razon , ni á la obligacion. Los frutos de su amor : ternal fue- da unas lecciones de grandeza, de dig- nidad , de: agrado y de radica. Su era mucho mas poderoso 0 ¡Ó hijos tiernos y. afli- gidos! Vosotros conservareis siempre ésta amorosa y eterna memoria , y honrareis á estos grandes Reyes, imitando sus vir= tudes. A la verdad, Señores, no hay cosa a e mas