BCCPAM0001138-1-2900000000000

DIA PRIMERO. 31 tienlarisima g racia de haberos consagrado á Dios en su templo santo, para.su servicio, para. que seais sus fieles esposas, para. que canteis noche y dia sus grandes mi- seyicordias, y. las magnificas obras de sus Manos, con aquellos mismos himnos y salmos, que el grande /avid compuso, y que teneis todos. los dias á la “vista, -400- piando:con estos ejercicios santos de virtudes Jos espiri- +uales materiales que son menester en vuestro religioso gorazon, para formar-en el un templo digno de Dios, y agradable morada suya. Porque efectivamente, carisi- mas, por mas que Dios os hubiera llamado eon particu” lares auxilios allá en el mundo: por mas que hubiera puesto los ojos de su misericordia sobre. vosotras; para separar yuestro corazon. de los errores, de los. peligros, y de las tinieblas del mundo; si al fin os hubiera dejado en: él, sin traeros á su amada casa, 4 este santo templo, á este asilo de vuestra fragilidad; y 4 esta fortaleza de vuestra inocencia, ¿4 cuántos tropiezos, 4 guántas cai- das, á cuántos pecados hnbiérais quedado expuestas? ¡Ay Dios!. Los malos ejemplos «del mundo, tal yoz 004 formes á las inclinaciones de nuestra viciada naturaleza, podrian"haberos hecho perder el santo temor de Dios, y seguir el camino de los desórdenes. Acaso las falsas má- ximas del mundo, tan contrarias comunmente á los pre- ceptos del Santo Eyangelio, os hubieran arrastrado 4 Ja inmodestia en los vestidos, á la.frecuencia de los teatros, á los peligros de los bailos, á los fatales encuentros de las malas compañías, que ahora arrancarian de vuestros ojos perennes lágrimas mientras os durase la vida, Por desgracia, los estilos del mundo, las costumbres del mundo, modas y leyes del mundo, podrian haberos hg- cho olvidar la virtmosa instruecion que recibísteis de vuestros padres, y siguiendo el partido de la viciosa li- bertad, seríais las primeras en los juegos, en los. paseos, en la ociosidad, en el olvido de los Sacramentos, de la oracion, y del retiro, cayendo en el endurecimiento del corazon, y en la final impenitencia.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz