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16 EJERCICIOS ESPIRILUALES. Señor, y cuán inmenso el lugar de-su habitacion! Veré los cielos, obra de tus dedos, y la luna y las estrellas que tú criaste. Allí, alma mia, será tu eterna morada: allí te espera un premio eterno: allí será Dios para tí todas las cosas. Resuélvete ahora á dejarlas todas por Dios: á usar de ellas solo por Dios, á no poner el fin en ellas sino en Dios, y á no amar mas que á solo Dios en todas ellas. EXÁMEN PRÁCTICO SOBRE LA CONFESION SACRAMENTAL. Venerebles Religiosas, siendo como efectivamente lo es una verdad de fé, que nosotros por nosotros mis- mos no podemos obrar, hablar, ni pensar cosa sobre- natural y meritoria de vida eterna; sino que nuestra suficiencia ha de venir de Dios, y que es efecto de su divina gracia, con la que debe cooperar toda. criatura, muy justo es que se la pidamos con repetidos clamores ara conocer nuestros pecados y llorarlos, como se lo pe- Ma el santo Job cuarido le decia: manifiéstame , Señor, mis iniquidades: muéstrame mis vicios y pecados: co- nozca yo todos los desórdenes de mi corazon, para que ayudado de vuestra gracia, pueda detestarlos y arro- jarlos de mí con la confesion mas perfecta , que ponga en seguridad mi conciencia, tanto por lo que mira á las confesiones que hice en la vida secular, como las que hago en mi vida religiosa: guantas habeo iniquitates el peccata ostende mihs. El Sacramento mas necesario al cristiano despues de haber e es sin duda el de la santa penitencia. Segunda Tabla es llamado por el Sagrado Concilio de Trento, en que el cristiano despues del naufragio de la culpa, puede arribar-á puerto de salvacion. No hay otro sacramento que con más frecuencia sea recibido en el mundo; pero si damos la fé que se merecen á los Santos Padres y al Concilio Lateranense, tampoco hay sacra-

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